martes, 27 de octubre de 2015

RESUMEN DE LOS CAPÍTULOS 1 Y 2, ROMA NO PAGA TRAIDORES

Un joven romano llamado Manio Manlio Escévola y una joven a la que llevaba amando desde los nueve años, llamada Claudia, se iban a casar el los idus de abril. Ya que Manio deseaba que no decayera ni un instante la felicidad de Claudia, deciden irse a vivir a Pompeya estando ya casados. Nada más llegar a la ciudad, Manio decide salir a la calle en busca de entretenimiento. En el foro le dicen que se iba a representar una obra de Esquilo (Las suplicantes), y dado que era el dramaturgo favorito de Claudia, deciden ir.  Al cabo ya de un buen rato, un hombre profirió un grito desgarrador.
 -¡Está muerto! -gritó una persona.
 Las personas salieron corriendo y Manio le dijo a Claudia que se fuese para casa mientras él se acercaba ha ver que había pasado. Allí también se encontraba Estéfanos, también conocido como El Griego, la persona que había ayudado a Manio a resolver el asesinato de su padre y que se había convertido en un segundo padre para él. Estéfanos le explica que el hombre al que habían asesinado era Siamon, un egipcio ayudante junto a Amasis del calígrafo Petosiris, amigo íntimo de Estéfanos. Ellos tenían encomendada una misión por el emperador Tiberio, que les ordenó descifrar unos jeroglíficos creados a partir de unos signos desconocidos encontrados, hace apenas dos años, en la tumba de la adivina Berecine. Cuando Petosiris y sus ayudantes terminaron la transcripción, Petosiris fue asesinado y sus ayudantes desaparecieron. Al cabo de dos semanas, un hermano de Siamon se puso en contacto con Estéfanos, ya que su hermano se lo había pedido, y quedaron  en el teatro de Pompeya, para que Siamon le diera la transcripción...